Remake

Esta entrada quizás quede un poco desubicada junto con las anteriores, pero estoy tan caliente que, o lo vuelco en este escrito o salgo en la tapa de los diarios (en el Clarín no, me abstengo a participar en una guerra que no me corresponde).

Ayer estaba hablando con un amigo. En el vaivén de la charla, me pasa un link a un trailer de "la nueva película de Freddy Krueger" (Ya, hasta me da asco llamarla así).

A medida que iban pasando las imágenes, el calentamiento global de mis cojones iba en aumento.

Yo crecí con Freddy Krueger. Más que una película, fueron horas compartidas con mi madre (que ahora no está de la misma manera que antes). Terminé convirtiéndolo en un símbolo de mi infancia perdida... como muestra casi afectuosa de ésto, hasta tatué en mi pierna derecha el rostro de este héroe.

Esta gente no entiende todo esto. Ni mi punto de vista, ni el de otros miles de fanáticos más. Robert Englund (el actor que representaba el papel de Freddy, para los despistados) no era solo un rostro. Era una personalidad, un humor único. Es como si alguien tratara de hacerse pasar por mi. O por alguno de ustedes.

Comprendo que el señor Englund hoy día esté quizás muy viejo para poder volver a escena...pero que más dá!...antes que esta porquería con la que me encontré, con imágenes calcadas de la primera pero con otras caras más mediocres....prefería mil veces ver un Remake con Robert Englund en silla de ruedas!!!

Y ahora si, llego el momento de la descarga antes de despedirme:

Estoy enojadísima! Publicando mi opinión en todos los videos de Youtube donde aparece el trailer...y para mejor demostración de enojo...en la lengua madre de Freddy!...

¡A ver! ¡¡Yo me raspé la cara de Freddy en una pierna!!! ¡¡Sangré dos horas y media para tener grabada la cara de verdad! ¡Y ahora me ponen esta basofia!

¡¡Ahora hay una cara de nada en la bañera donde antes estaba Nancyyy!!!

¡¡¡La puta madre!!! ¡Qué encabronada estoy!!

Pásame un arma....